top of page

 Cuatro pañuelucos  

Cuatro  pañuelucos tengo, olé, ole, y los cuatro son de seda;

que me los ha regalado, olé, olé, una mozuca soltera.

 

Que  qué hay de particulillo, que qué hay de particular,

que si ella me quiere mucho, yo la quiero mucho más.

 

Cuando no la cortejaba, olé, olé, no la cortejaba nadie;

y ahora que yo la cortejo, olé, olé, la cortejan los chavales.

 

Que qué hay de particulillo…

 

Caminito de la fuente, olé, olé, te ví cortando una rosa,

y te dije buenos días olé, olé, por no  decirte otra cosa.

 

Que qué hay de particulillo…

 

Estas palabras le dije, olé, olé, al pasar la portezuela:

Dios quiera que los tus hijos, olé, olé, llamen a mi madre abuela.

 

Que qué hay de particulillo…

bottom of page